Siete (7) aptitudes con las que debe contar un Diplomático del siglo XXI- Artículo de opinión por Ma
- CONADIP artículos de opinión
- 6 sept 2018
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Siete (7) aptitudes con las que debe contar un Diplomático del siglo XXI Por Marcelino Avilés, Segundo Secretario, Vicepresidente del Colegio Nacional de Diplomáticos de Carrera - CONADIP. Trabajar en el campo de las Relaciones Internacionales implica llevar un estilo de vida distinto al de muchas otras profesiones en que por lo general se vive en un solo territorio, familia y amigos permanecen constantes a través de los años. En cambio, al elegir una profesión en movimiento, el diplomático debe internacionalizar varios aspectos para representar a su nación con la mejor actitud, para defender sus intereses y -lo más importante- encontrar un equilibrio entre la vida laboral y la personal, pues tendrá que vivir entre 5 a 6 años en el exterior, volver al Ministerio de Relaciones Exteriores algunos años para luego volver a cambiar de escenario en otro país y así sucesivamente. Estas son las 7 aptitudes con las que debe contar un Diplomático del siglo XXI: 1. Alinearse a las nuevas tendencias y la tecnología: Estamos viviendo en una nueva revolución digital, cada día las actividades cotidianas se simplifican por medio de herramientas que hace unos 20 años no existían. La inteligencia artificial está llegando a sorprendernos cada día más y nos permite comunicarnos en tiempo real, por lo que no tenemos que esperar mucho tiempo para contar con instrucciones de la Casa matriz o los Ministerios de Relaciones Exteriores para poder actuar. 2. Adaptarse a los nuevos lugares y culturas con facilidad: Optimizar la experiencia de su entorno es muy importante y vital. Cada nación cuenta con sus tradiciones e historia, manifestando en diversas expresiones el orgullo por las mismas. Es primordial respetar y comprender las otras culturas, aunque sean distintas a la nuestra. Al aceptar que esta diversidad nos enriquece será posible pasar una estadía increíble; especialmente propiciar el intercambio para demostrar la cultura del país de origen con la llamada nueva Diplomacia Cultural. 3. Disposición para aprender idiomas: Aunque hoy la tecnología está avanzando muy rápidamente y existan los novedosos traductores automáticos, no hay nada mejor que la expresión directa del idioma del país receptor para ser aceptado en la sociedad, con lo que facilitará su trabajo como emisario de su nación. Hoy en día existen aplicaciones móviles y canales virtuales gratuitos que permiten practicar nuevas lenguas, como por ejemplo https://www.duolingo.com; https://www.memrise.com. También diversos canales en https://m.youtube.com y hasta cursos en plataformas creados por las grandes universidades de la talla de Harvard y Stanford como: https://www.edx.org; https://www.coursera.org Hay muchas opciones al aprender, simplemente se debe deleitarse con el nuevo idioma, aunque el mejor aprendizaje es con la práctica constante en el lugar donde la lengua es nativa. 4. Ser un buen orador y comunicador: Es muy importante ser un buen transmisor de las virtudes de su país, sobre política, turismo, arte y cultura, geografía, historia, el comercio y su economía. Esto apoyará el intercambio entre ambas naciones, especialmente para mantener las buenas relaciones de amistad y cooperación. 5. Mantener la discreción: Un Diplomático debe mantener la información resguardada y solo transmitirla cuando esté autorizado para hacerlo. Recuerde que es depositario de una gran confianza para proteger los intereses del país al cual representa. 6. Buen conocedor de las técnicas de negociación: Un Diplomático debe procurar entrenarse y ser buen negociador. Esta buena práctica ayudará a encontrar soluciones dinámicas a situaciones importantes para el bienestar de ambos países o a nivel multilateral. Como buen intermediario debe saber analizar, estar preparado, conocer los antecedentes de las partes, el propósito y visión del asunto en cuestión, con el objetivo de llegar a un excelente acuerdo. 7. Practicar el Protocolo y reglas de urbanidad: Definitivamente comportarse adecuadamente, comer y vestirse de la forma apropiada es algo que debe conocerse y practicarse: atuendos planchados, zapatos limpios, colores apropiados según la ocasión; conocer la diferencia de los diversos vinos, no hablar con la boca llena, ni comer muy rápido; dominar el uso correcto de los cubiertos; saber cómo se saluda en las diversas culturas; entregar su tarjeta de presentación. Muchas de las actividades de negociación, cierres de citas o búsqueda de oportunidades para su país se desarrollan en los cócteles sociales, almuerzos o cenas. Es posible que un alto funcionario que no le haya podido atender en horas laborales, se encuentre mejor dispuesto a darle una respuesta durante una reunión social, en un ambiente más relajado. Definitivamente, existen muchas aptitudes para ser valoradas, pero es importante recordar que esta profesión es sacrificada donde solo la comprender los que con vocación y servicio desean aportar positivamente a su nación. Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura de CONADIP
